
Nuestra Espiritualidad
- Alegría en Cristo: Vivimos la vida con perfecta alegría, incluso en medio del sufrimiento, confiando plenamente en el amor de Dios.
- Conformadas a Cristo: Nos esforzamos por moldear nuestra vida según el ejemplo de Jesús, siguiendo sus pasos con fidelidad y amor.
- Amor en clave franciscana: Inspiradas por la espiritualidad de San Francisco, amamos al Padre y a todas las criaturas, reconociendo en ellas la huella divina.
- Bajo el amparo de María: Siguiendo el modelo de la Virgen María, servimos con total entrega a la Palabra de Dios, convirtiéndola en el centro de nuestra misión.
- Cruz y fe: Acogemos el Misterio de la Cruz como un signo de esperanza y redención, viviendo en profunda comunión con el sacrificio de Cristo.
- Edificación de la Iglesia: Participamos activamente en la vida de la Iglesia, permitiendo que el Espíritu Santo nos guíe en la construcción de una comunidad eclesial viva y fraterna.
Instituto Secular “Misioneras del Evangelio”.
El Instituto Secular “Misioneras del Evangelio” es una comunidad de mujeres consagradas que, por vocación, viven inmersas en el mundo con una entrega total a Dios. Inspiradas por el carisma franciscano y en fidelidad al Magisterio de la Iglesia, nos comprometemos a escuchar, encarnar, testimoniar y proclamar el Evangelio en cada ámbito de nuestra vida cotidiana.
Nacido del Movimiento “Presencia del Evangelio” y agregado a la Orden de los Frailes Menores, nuestro Instituto busca ser una luz transformadora en el mundo, llevando el mensaje de esperanza y amor de Cristo. Por medio de la profesión de los Consejos Evangélicos y una formación integral –humana y espiritual–, trabajamos con alegría y dedicación para cumplir nuestra misión de evangelización.
Te invitamos a conocer más sobre nuestro carisma y nuestra labor, y a descubrir cómo vivimos el Evangelio en el corazón del mundo.
Nuestra Misión
- Transformar desde dentro: Actuamos como levadura en el mundo, contribuyendo a su transformación desde el interior, porque creemos en el poder regenerador de la Palabra de Dios.
- Presencia en todos los ámbitos: Nos insertamos en diversas realidades civiles, como hogares, escuelas, hospitales, universidades, empresas, medios de comunicación y oficinas, llevando el mensaje del Evangelio a cada espacio.
- Testimonio en la vida cotidiana: Compartimos las experiencias humanas del día a día, viviendo y trabajando como los demás, pero con una consagración que nos impulsa a ser testigos del amor de Dios en el mundo.



